Y llegó a mi Madrid, o yo a la ciudad. Todo detrás de una ventana, a veces con las persianas bajas, otras mirando de frente a las calles, las ventanas, los ojos de quienes caminan anónimos por la capital.
Llegó, y llegó el amor a escondidas, ocultos de nadie y de nada. "Abril, tres de la mañana; apuntes para un poema" habla de eso: amor, soledad, anonimato, miedo...
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